Hace rato quería sentarme a escribir este post, y bueno, si espero el momento ideal jamás llegará! =)

Es sobre los actos y sus consecuencias.

En casa existen las consecuencias. Es decir, si las nenas hacen algo que va en contra a las reglas familiares, o que simplemente estuvo mal, ellas entienden la famosa ley de «causa y efecto». Para mí es muy importante enseñarles que todo lo que hacemos (y lo que dejamos de hacer) deja una huella y tiene impacto en el ámbito en que nos movemos y en la gente que nos rodea.

La consecuencia llega sobre temas que ya se hablaron y se recontra hablaron. Temas que están más que claros, temas sobre los que ya aprendimos a manejarlos. Es decir, en casa, la consecuencia es un segundo paso, y lejos de verse como un castigo, es nuestra forma de reforzar un aprendizaje.

Pero claro, para que la consecuencia sea realmente consecuencia y no un castigo, debe tener que ver con la acción inicial! Y no siempre es fácil encontrarla.

Les quiero compartir 2 cosas que pasaron en casa, y qué decisión tomamos los dultos:

Un día Gaia se llevó un reloj despertador que les había regalado a las dos al parque de nuestro fraccionamiento. Cuando la fui a buscar porque ya se había cumplido la hora establecida y no llegaba, vi el reloj en medio del pasto, pisado y roto. Demás está decir que le pedí que lo cuidara. Le pregunté qué había pasado y me dijo que lo había dejado tirado en el pasto.
Al día siguiente, ella estaba con el termómetro y le dije que no era algo para jugar, que teníamos que cuidarlo para usarlo en caso de necesidad. A los 10 minutos el termómetro estaba roto en el piso.


En ese momento me preocupó no sólo que no me escuchara, sino que sentí que realmente no tenía idea del valor de las cosas, y era mi responsabilidad enseñárselo. Así que decidimos con papá que ella debería reponer las 2 cosas. Para juntar el dinero, tomé 4 o 5 labores de la casa, de diferente dificultad, y le puse precios. Tuvo 1 mes para juntar el valor total de las 2 cosas rotas.


Para esto, le enseñé a programarse. Con la ayuda de su agenda y la calculadora, fue anotando lo que debería hacer cada día para juntar el dinero en el tiempo estipulado.


Estoy contenta del resultado. No solo valoró mi trabajo en la casa, sino que valoró el esfuerzo de juntar el dinero para comprar algo. Siento que manejamos el tema con asertividad, y fue un aprendizaje real.

¿Y ustedes cómo manejan el difícil tema de las consecuencias? ¿Cómo hacen cuando no hallan una consecuencia congruente con la acción inicial???!!!!