Es un post algo atrasado, pero no quería dejar de compartirlo.

Mi caso es algo raro… como argentina jamás festejé halloween en mi Buenos Aires querido, ni siquiera jamás tocaron a mi puerta chicos disfrazados pidiendo calaveritas (aunque creo que recién ahora se está poniendo de moda, tendría que investigar con mis amigos de allá).

Por otro lado, el Día de Muertos en mi tierra es un acto solemne y católico, que se limita a no poner música fuerte ese día e ir u organizar alguna misa para recordar a tus muertos.

Y bueno, mi maternidad se dio muy lejos de mis raíces, y junto con mis hijas voy aprendiendo y adoptando tradiciones y costumbres, por momentos tan ajenas a las mías, por momentos tan encantadoras.

Y bueno, este año en casa festejamos las dos cosas, así:

Día de Muertos, las nenas armaron el altar, por primera vez ellas solitas:

Y Halloween fue especial, porque todos somos nuevos en el fraccionamiento (barrio cerrado) y ni nos conocíamos, así que entre los vecinos decidimos organizar un convivio (reunión), y disfrazar a los chicos para que pidan su calaverita =)
Fue algo muy positivo poder charlar con mis vecinos, en una época donde la tribu está en vías de extinción, y el individualismo y el aislamiento hacen que no sepas el nombre de tu vecino de la esquina aunque haya estado ahí por años..

Y bueno, nos despedimos, con 2 botes repletos de dulces!!!! ¿Gustan?