Dejar que los chicos tomen parte de las actividades en la cocina puede ser un disparador de preguntas, una fuente de adquisición de nuevas habilidades y creatividad. Sí, lo sé, al terminar tendremos el triple de trabajo para ordenar y limpiar el desastre que dejaron, pero vale la pena el esfuerzo.
Aquí vemos a Zyani hace muuuucho, trabajando motricidad fina con la «pelada» de chícharos (arvejas):
Aquí Gaia le está preparando el desayuno a su hermanita: trabaja motricidad, y también el sentido de ayuda mutua y colaboración como miembro de la familia:
En casa existe la tradición de la preparación de las milanesas de soya!! ellas las comen desde bebés y por supuesto, ya aprendieron a prepararlas!! les encanta hacer todo el proceso de moler los frijoles (porotos) de soya, agregar huevo, ajo y demás ingredientes, y con la mezcla agregar harina y avena y formar la masa y dar forma a las milanesas. De esta preparación surgieron temas como productos derivados, consumo de carnes, maneras de obtener los aminoácidos esenciales de otras maneras que no sea la carne:

 Trabajando prensión con Zyani y cuchillo con Gaia. También surgió el uso de pesticidas, la desinfección de los vegetales, enfermedades que causan los bichitos que tienen las verduras:

 Y aquí la querida masa!!! cuando mamá hace pizza o tarta, ellas tienen su propia masa!! con la masa surgió por primera vez el tema de los productos derivados…. recuerdo que Gaia no podía creer que esa «arenita blanca» que tenía entre sus manos había salido de una plantita! tuve que buscar en internet el proceso y mostrárselo. Generalmente les daba la masa hecha, pero aquí ellas tuvieron que descubrir las proporciones de agua y harina para lograr una masa manejable y no tan pegajosa….

… aunque Zyani no lograba despegarse de su «preparado»!!!!

También mientras cocinamos trato de comentarles acerca de los grupos de alimentos, qué nos proporciona cada uno, y ellas lo van asimilando. Personalmente creo que el conocimiento de lo que comen es tan importante como aprender a leer o a sumar. Somos lo que comemos.
Son algunas ideas. Es importante que los chicos aprendan a través de las actividades cotidianas, y no sólo de juguetes y materiales que -obviamente- imitan a la vida real.