Esta canción me encanta y me emociona tremendamente…. me hace recordar la vulnerabilidad de los chicos, y a la vez su gran fortaleza…
Es una cachetada que me grita que mi responsabilidad como mamá, como adulto, es tomar las decisiones delicadamente, tratando de respetar siempre las libertades, los derechos de mis hijas, escuchando su voz, acompañándolas pero nunca obligándolas ni censurándolas, y mucho menos maltratarlas ni física, ni psicológicamente.
Como habitante de este planeta me dice que no puedo ser indiferente al sufrimiento de tantos chicos… esto me llevó a reflexionar y voy a ponerme en campaña de buscar alguna actividad para hacer con las nenas que tenga por objeto ayudar a otros chicos que necesitan más que ellas…. mostrarles diferentes realidades y enseñarles que la solución es el Hacer, y no el lamentar.
Es mi mayor deseo que nuestros niños sigan cantando, siempre, para recordarnos que su vida y su felicidad están absolutamente en nuestras manos.
Fundadora de ALAS y argentina adicta al mate, viviendo en México desde 2002. Músico y apasionada investigadora de todo lo que tenga que ver con los procesos de aprendizaje, gamificación, proyectos educativos alternativos y necesidades educativas del siglo XXI. Educa sin escuela a sus dos hijos Mati (2004) y Zyani (2008). Si te interesa el homeschooling, puedes recorrer su blog en el que plasmó su propio proceso desde 2010 y publica proyectos y creaciones de los estudiantes de ALAS.