adolescencia-homeschool

.

Soy mamá de una adolescente que en unos meses cumplirá 13 años. Como siempre digo, cada nueva etapa de los hijos es un reto para reinventarnos, revisar objetivos y prioridades, y reacomodar nuestro día a día para caminar hacia la dirección correcta.

Soy una persona muy reflexiva. Muy. En este último año he reflexionado tanto acerca de mi flamante adolescente y la mejor manera de acompañarla en su camino hacia la adultez! La veo y me emociona verla tan grande… su cuerpo ha cambiado tanto! Ya me alcanzó en estatura, y creo que seguirá de largo. Sus pensamientos y emociones también han cambiado, y cambió su forma de hablar (o callar), su manera de expresar lo que siente (muchas veces con explosiones de euforia o enojo).

También cambió su mirada… antes miraba como si el mundo sólo estuviera habitado por el ser más maravilloso: yo. Ahora mira a través de mí. Me observa, me analiza, presiente qué estoy sintiendo y por qué siento así… puedo sentir cómo me lee el alma cuando me abraza sin decir nada, como sabiendo que lo que yo necesitaba en ese momento era un abrazo fuerte, como los que ella sabe dar tan bonito. También me reprueba, a veces en silencio y otras con algún reproche;  ahí me doy cuenta de que ya tomó conciencia de que mamá es una simple e imperfecta mortal, y en el fondo de mi corazón hago duelo por aquella niñita que sólo me admiraba y me consideraba perfecta.

A veces me asusta el cambio, para qué te digo otra cosa. Otras veces me maravilla, y pongo todo de mí para adaptarme a los cambios.

Hoy quiero hablarte de 4 cosas que considero súper importantes a la hora de acompañar a mi adolescente homeschooler en esta etapa de su vida. 4 cosas que me están ayudando a que nuestro camino sin escuela sea como ha sido hasta ahora: mágico, productivo, cercano, con sentido. Sin más, éstos son mis consejos…

.

1- NO DESCONECTES NI TE ALEJES

Como te decía arriba, los cambios a veces asustan. Como nuestros hijos no responden como estamos acostumbrados a que lo hagan, nos sentimos desconcertados, y podemos caer en el error de cerrarnos o alejarnos un poco, más aún si hay otros hijos menores en casa. Si hay algo que aprendi con mi hija, es que en esta etapa les cuesta más pedir atención, compañía, mimos o acompañamiento. Pero esto no significa de ninguna manera de que no necesiten mucho (muchísimo!) de todas estas cosas.

No l@ sofoques, pero mantente cerca, muy cerca de tu adolescente. Comparte tus proyectos y anhelos con él/ella y escucha todo lo que tiene para contarte en el día a día (que no es poco). Abrázal@, dile lo mucho que l@ amas. Házle saber a cada momento lo orgullos@ que te sientes de él/ella.

Interésate en sus pasiones e intereses de hoy: lee el libro que a él/ella de encanta para comentarlo luego, miren juntos la serie o peli que adora, escucha su música, investiga acerca de esos temas de los que te habla constantemente para poder hacer aportes interesantes. El adolescente adora compartir sus intereses contigo.

Hagan cosas juntos en casa, programen salidas a solas, rían mucho, sean confidentes, tengan proyectos en conjunto que l@s emocione. Estos años son maravillosos, porque tu adolescente ya está grande como para hacer muchísimas cosas que antes, por inmadurez, no podías compartir con él/ella. Y estos años pasarán muy rápido, tan rápido como ha pasado su niñez. Disfruta.

.

2- ENFÓCATE EN LO IMPORTANTE EN ESTE MOMENTO DE SU VIDA

Cuando pensaba en la adolescencia de mi hija mayor, cuando ella aún era pequeña, me preocupaba mucho no saber de química, física o filosofía… ¿cómo iba a hacer con el homeschooling y sus necesidades académicas? ¿Tendría dinero para profesores particulares? ¿O ella quedaría semi-analfabeta?

Y bueno, ha llegado el momento tan soñado. Hoy he de decirte que lo que menos me preocupa es qué aprenderá de química, física y filosofía. De hecho, me importa poco que lo aprenda ahora.

Hoy tengo mi propia lista de las áreas que creo fundamentales en esta etapa de su vida, y que serán determinantes para que ella llegue a ser una adulta feliz, plena, sana y productiva. Te comparto mi lista por si te sirve algo =)

  • Comprensión profunda y global del mundo y época en la que le tocó vivir, con sus oportunidades y desventajas, con sus maravillas y horrores. «Conociendo y entendiendo al mundo y sus códigos, puedo insertarme con seguridad, confianza y con las precauciones necesarias para cuidar mi integridad, utilizando el lenguaje y las estrategias adecuadas para tomar del mundo lo que necesito y aportar lo que el mundo necesita de mí».
  • Espíritu compasivo, sensible, empático y solidario con el planeta y con quienes lo habitan.
  • Descubrimiento de su propósito de vida: «Para qué estoy aquí, qué me inspira y motiva que pueda desarrollar, que beneficie a los demás y haga de este mundo un lugar mejor de lo que lo encontré».
  • Desarrollo de 3 hábitos: Disciplina, voluntad y buena actitud.
  • Salud y nutrición: «Mi cuerpo es maravilloso y necesito conocerlo, mantenerlo sano y bien nutrido, ejercitarlo y cuidarlo mucho, porque es el único que tengo».

Y claro, de estos puntos se desprenden muchos objetivos concretos, su plan de estudios y un camino de aprendizaje a recorrer. Ya te iré contando más acerca de cómo trabajamos estos puntos en próximos artículos.

.

3- SÉ UNA FIGURA ASERTIVA DE AUTORIDAD

Tu adolescente sigue necesitándote como referente y guía. No te hagas a un costado ni, por el contrario, intentes implementar un autoritarismo ciego. En vez de explayarme en este apartado, te invito a leer AQUÍ un artículo acerca de autoridad positiva que me ha encantado porque expresa muy bien lo que quiero decirte. ¡No creo poder escribirlo mejor!

.

4- COMIENZA A SOLTAR

Lo sé, cuesta mucho. Pero en algún momento tenemos que empezar a soltar para que el camino hacia la independencia sea suave, orgánico, enriquecedor, y los errores que pudieran cometer en el proceso no sean demasiado graves o con consecuencias difíciles de revertir.

Tomar decisiones responsables y conscientes es una habilidad que requiere de mucho entrenamiento. ¿Por qué esperar a que sean mayores para soltar, acarreando con ello consecuencias muy graves, producto de la total falta de experiencia de nuestr@ hij@ en este campo?

En primer lugar, dile a tu adolescente cuánto confías en él/ella. Y luego comienza a soltar primero en pequeñas cosas, y cuando sientas que hubo aciertos, desaciertos y aprendizajes, sigue soltando, cada vez en cosas más importantes. Ceder el control puede resultar muy conflictivo para algunos papás, pero por su bien hay que hacerlo, cuidando de quedarnos cerca, bien cerca, por si las cosas no van como ellos se imaginaron, o por si necesitan algún consejillo o sugerencia. Y pase lo que pase, jamás recrimines una decisión mal tomada. Más bien ábrete y charlen, analicen, saquen lo positivo y aprendan de lo negativo. ¡De eso se trata crecer!

Duele que se equivoquen, cómo no (lloro al recordar algunas desilusiones). Pero dejarlos tomar decisiones es la única manera de ayudarlos a convertirse en personas más sabias, responsables, intuitivas y reflexivas.

Y por último, quiero decirte que tener un hijo adolescente es la cosa más maravillosa que puede pasarnos, digna de ser vivida como un momento sagrado y único.