Cuando decidimos educar a los chicos en casa, es FUNDAMENTAL que ellos (nenes y nenas por igual) participen en el mantenimiento del orden y la limpieza de la casa. Si todos vamos a estar mucho tiempo compartiendo espacios, es justo que todos ayudemos para mantenerlos ordenados y limpios, y que nuestra cotidianeidad sea más agradable.

De esta manera se instalará en la casa un espíritu de colaboración y servicio, fomentando el trabajo en equipo para un bien común.

 

 

Es importante tener en cuenta las edades de los chicos, para no ofrecer tareas que aún no son capaces de hacer.

 

Por otro lado, y aunque a veces nos alargue el tiempo que teníamos pensado dedicar a alguna tarea, es muy importante que no rechacemos la ayuda que ellos quieren darnos. Por ejemplo:

 

Si estás tendiendo tu cama y viene tu hij@ pequeñ@ y te dice «mami yo te ayudo», y vos sepas que eso significa que el tiempo de tendido de la cama se alargará 10 minutos, dile que SI. Es muy importante alentar las ganas de ayudar.

 

Si estás barriendo y tu hij@ te dice «yo lo hago mami» mientras te quita la escoba de las manos, déjate ayudar y agredécele… no importa si el piso no quedó como querías (ni se te ocurra volver a barrer cuando el peque termina!! es decirle sin palabras que lo hizo mal).

 
Con el tiempo, trabajar en equipo será para ellos la manera más natural de convivir en casa.